'La Casa del Dragón': pura esencia de 'Juego de Tronos'

'La Casa del Dragón' es pura esencia de 'Juego de Tronos'. Sucede 170 años antes de esta última súper serie, y cuenta con elementos parecidos. 

La diferencia es que los siete reinos están en paz y gobernados por un rey de la Casa Targaryen (esos rubitos-albinos tipo Haaland), Viserys I, el más poderoso, que ostenta el Trono de Hierro, apoyado en el poder absoluto de diez dragones.

Los problemas, en un mundo pacífico y sin guerras, con solo unos piratas sin importancia molestando en un extremo del Reino, surgirá por el intento de hacerse con el poder (un anhelo, más que nada) del bandarra sobrino del rey, Daemon Targaryen.

Asistiremos en el primer capítulo a la búsqueda de un heredero al Trono de Hierro, a las justas sangrientas (como en la arena de Roma) entre los caballeros de las principales casas, los sueños de la hija del Rey, Rhaenyra Targaryen (el personaje más equilibrado), las luchas de poder dentro del comité asesor de este (ojo a la rivalidad entre el sobrino y la Mano del Rey)...

A la espera del segundo capítulo, esto huele a una excelente precuela de la magnífica y brutal 'Juego de Tronos'.

'Showtrial': suspense en estado puro

'Showtrial' es una serie de suspense en estado puro. Se nota la mano de la BBC. Es pulcra, perfectamente grabada y excelentemente interpretada. Un producto policial de alta calidad.

La acción, centrada en lo policial y lo judicial, cuenta con una dosis de suspense elevada, una trama muy bien orquestada y una intriga que nos obliga a mantenernos fijos en el sillón.

Una abogada del turno de oficio, Cleo (genial actriz Tracy Ifeachor), se ve obligada a defender a una joven rica Talitha Campbell (perfecta Celine Buckens) de la acusación de asesinato. Esta es la hija de uno de los mas poderosos hombres de negocios de Londres y, además, en la noche de autos andaba de fiesta con el hijo de una importante diputada.

A partir de la investigación policial se descubrirán las mentiras que sacuden el caso, se cerrará el cerco sobre los altivos acusados y no parará de dar giros la trama, cada nuevo cambio más interesante que el anterior.

Pura joya televisiva inglesa sobre una cruel muerte con muchas sospechas, varias versiones y ocultando un mundo de podredumbre. 

'Sandman': un cuento fantástico, mágico, duro, sangriento, impactante, violento, absorbente y divertido

'Sandman' es una muy buena serie. Donde el bien (no tan bueno) se enfrenta al mal (no tan malo). El protagonista es 'Sandman', un eterno, el rey de los sueños, una especie de Dios que vive en otra dimensión mágica. Lo interpreta un genial Tom Sturridge, que llega a dar miedo.

'Sandman' vive en nuestros sueños y permite que estos nos hagan avanzar, con ilusión y esperanza. Sin embargo, los enemigos de este ser eterno le plantearán trampas para hacerse con su mundo y acabar con los 'sueños'.

En la serie hay magia, fantasía, muerte, peleas, sangre, violencia y mucha imaginación. Es como un cuento de hadas donde los malignos no cesan de torpedear el normal transcurrir de la vida.

Épico es el duelo entre un Sandman debilitado (los humanos le han robado sus bártulos, objetos que le dan poder) y Satanás, encarnado por una genial Gwendoline Christie (la poderosa y altísima caballero de Juego de Tronos).

También la aparición de un Vórtice, que hará tambalear el mundo de la imaginación, dará consistencia y dotará de frenesí esta poderosa y potente serie.

Las surrealistas luchas entre Caín y Abel aportan humor, lo mismo que el cuervo que vigila y protege a Sandman cuando visita nuestro mundo.

Y el encuentro-convención de asesinos en serie en un hotel americano, lo borda.

En fin, un cómic de elevado nivel, obra del gran Neil Gaiman, convertido en una serie de calidad suprema.