'Múnich en vísperas de una guerra': lenta y previsible

'Múnich en vísperas de una guerra' es una película lenta y previsible. Lenta porque parece no querer arrancar nunca. Y previsible porque pese a cualquier cosa que hagan los amigos inglés y alemán, Hitler irá a la guerra.

Eso sí, genial la interpretación de Jeremy Irons de un ingenuo y atontado Nevil Chamberlain, primer ministro inglés en 1938.

La película está muy bien ambientada y empieza como si fuese un 'Club de los poetas muertos' trasladado a Oxford... Pero pierde fuelle, se instala en la autocomplacencia, en el no pasar nada de nada, en la lentitud y el sopor.

Vamos, que no se puede perder el tiempo con un poema que no arranca cuando hay miles de relatos épicos por disfrutar. 

'Archivo 81': terroríficamente terrorífico

'Archivo 81' es de lo mejor en años en materia de serie de terror. Las hay de muy buenas (NOS4A2, Territorio Lovecraft, Stranger things, Penny dreadful...), pero está es buenísima. 

Inquietante, taquicárdica, de suspense intenso, con personajes prodigiosos y que dan mucho, pero que mucho miedo.

Es como si H. P. Lovecraft, Stephen King y Dean Koont se dieran la mano. Es una especie, pero en otro tono y con otros personajes que van de normales, pero son lo más inquietante al sur de Manhattan.

Esta es una serie, además, inteligente. No hay sobreactuaciones ni momentos de increíble incredibilidad. Es un cóctel perfecto de rutina diaria y miedo cerval. 

La vida de un joven restaurador de películas antiguas dará el vuelco cuando el extraño propietario de una multinacional le ofrezca mucho dinero por restaurar las cintas de vídeo quemadas en el incendio de un fantasmagórico edificio de Nueva York sucedido 30 años antes.

A partir de aquí los sucesos paranormales y los flash backs al antiguo edificio nos dejarán entrever una historia repleta de maldad, misterios, brujería y asuntos varios.

La verdad es que el ritmo y tono de la serie, las secuencias, la trama y todos los personajes son de alto nivel y voltaje poderoso.

'Archivo 81' se devora de una tacada porque afecta a nuestros miedos más profundos. Es desestabilizante y con un alma endiablada.

'Titanes': ¡bestial!

Muchas veces las películas basadas en cómics de superhéroes son poco entendibles o se pasan con la acción desmesurada. En el caso de 'Titanes' no sucede. Es como un antifilme del género, un lugar donde los héroes lo son menos, prima el argumento y no queda claro quién es bueno o malo. 

Se trata de un grupo de superhéroes de segunda fila. Por eso se denominan 'Titanes' con escasos súper poderes, aunque nada les parará a la hora de combatir a los delincuentes de Chicago y Gotham.

La trama gira entorno a una joven con extrañas capacidades (como la niña de El Exorcista, pero en sofisticado) a la que persigue una oscura hermandad para no se sabe qué finalidad.

Aquí entrará en juego un inspector de la Policía de Chicago, un ex vengador que intenta llevar a una vida normal, que se topará con esta joven.

Paralelamente se irán uniendo al juego familias típicamente americanas muy malas; halcones y palomas vengadores; una mujerona de 1,80 amante de la música de los 70 con poderes extraterráqueos; y un joven que es un tigre verde.

La verdad es que el suspense y la tensión son constantes. La trama está muy bien trabajada y ahonda en los traumas más profundos de cada uno de los personajes. La acción es poderosa. Y los desenlaces están muy bien trabajados, lo mismo que el drama que pervive en cada capítulo.

En definitiva, una serie de superhéroes con sentido, alma y sangre. Con escenas muy bien trabajadas y una historia densa, densa, densa... Un gustazo, vamos!!!