Es rara. Pero sienta bien. Porque tiene garra. El comienzo te descoloca, pero poco a poco lo pone todo en su sitio. La historia es buena, la imagen perfecta y los personajes tienen eso que se llama 'power'.
El soldado que regresa a Memphis en 1972 tras protagonizar ser acusado de una matanza en un poblado vietnamita tiene miga. Descolocado, aislado, condenado al ostracismo por su gente, debe buscarse la vida. Y su mujer no le ayuda demasiado.
Mac Conway (magistralmente interpretado por Logan Marshall-Green) es una caja de sorpresas, no solo porque se reenganchó para sufrir un segundo periodo de combate en Vietnam sino por los traumas vividos allí que se reflejan en su vida actual.
Mientras que Otis Redding pone la banda sonora de esta más que recomendable serie, en la que queremos saber cómo se llega a las imágenes del principio.
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