'Vikingos': excelente

    'Vikingos' es una gozada. Pese a las críticas por algunas inexactitudes en la trama, la reconstrucción histórica, de Dinamarca y Suecia, en el siglo IX, es magnífica e impresionante.

    La historia sobre Ragnar Lodbrok, el campesino guerrero, es interesantísima. La fotografía, el vestuario y las escenas son perfectas. Parece que convivamos con los terribles vikingos ("hombres del Norte") de hace un milenio.

    Acción, suspense y maquiavelismo dominan esta superproducción para la televisión, muy en la línea de la genial 'Roma'.

    El protagonista, Ragnar, está perfectamente interpretado por el versátil Travis Fimmel que tanto lo hace terrible como dulce, maquiavélico, tremendo o magnánimo. Su turbia y misteriosa mirada es de lo mejor de la serie.

    Su hermano, Rollo (Clive Standen) es otro de los personajes con más magnetismo, junto a su mujer, la ama de casa y experta guerrera Lagertha (Katheryn Winnick) y el inclasificable Floki (Gustav Skarsgard).

    Las cueles invasiones a Inglaterra, a sus vecinos de Lituania, las luchas entre clanes... convierten a esta serie en una mina de perfecto entretenimiento.