'El alienista' es una serie imprescindible. La recreación de Nueva York en 1896 es genial. El personaje principal, el alienista (psiquiatra) Laszlo Kreizler, interpretado a la perfección por el hispano-alemán Daniel Brühl, es poderoso, como los son sus compañeros el ilustrador de sucesos del New York Times John Moore (muy bueno Luke Evans) o la secretaria del comisario Theodore Roosevelt, interpretada por una magnífica Dakota Fanning, la primera mujer que accede al NYPD.
Todos ellos componen un grupo heterogéneo que investigará el asesinato brutal de niños prostitutos, vestidos de niñas, en la ciudad.
Las pesquisas, a lo Sherlock Holmes, intentarán dar con una verdadera bestia -prácticamente inhumana e infernal- entre las cloacas y la podredumbre de la gran ciudad.
Las subtramas son más que interesantes. Toda la serie rezuma intriga y cierto terror. La corrupción policial es otra de las bazas. Allí, estará el comisario Roosevelt -futuro presidente de EEUU- para intentar atajarla.
Es una serie que se disfruta y sufre. En la que se mezclan críticas a la sociedad clasista de la época y a la corrupción con acción, crímenes al estilo apache, investigación y mucho misterio.
Genial e imprescindible. Yo leí la novela de Caleb Carr en 1994, cuando salió al mercado, y me encantó. La película está perfectamente rodada. Es una gozada por la fotografía, los personajes y actores, y la oscuridad que transmite.
Todos ellos componen un grupo heterogéneo que investigará el asesinato brutal de niños prostitutos, vestidos de niñas, en la ciudad.
Las pesquisas, a lo Sherlock Holmes, intentarán dar con una verdadera bestia -prácticamente inhumana e infernal- entre las cloacas y la podredumbre de la gran ciudad.
Las subtramas son más que interesantes. Toda la serie rezuma intriga y cierto terror. La corrupción policial es otra de las bazas. Allí, estará el comisario Roosevelt -futuro presidente de EEUU- para intentar atajarla.
Es una serie que se disfruta y sufre. En la que se mezclan críticas a la sociedad clasista de la época y a la corrupción con acción, crímenes al estilo apache, investigación y mucho misterio.
Genial e imprescindible. Yo leí la novela de Caleb Carr en 1994, cuando salió al mercado, y me encantó. La película está perfectamente rodada. Es una gozada por la fotografía, los personajes y actores, y la oscuridad que transmite.
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